El Juzgado 2° de Control de Apure ordenó la apertura de juicio en contra de tres altos funcionarios de la Gobernación de Apure, acusados de actos de corrupción, según expediente 2C-25.098-22 al que tuvimos acceso parcial.
En este caso los imputados son: Laura Mercedes Rodríguez Sterlin (administradora), Jorge Luis Salazar Rangel (tesorero) y Arnoldo Javier Santana Lovera (gerente de facturación y pagos).
Estas personas fueron detenidas entre el 20 y el 23 de agosto de 2022, según contó en su momento el gobernador de Apure, Eduardo Piñate, quien las acusó de estar involucradas en “un gravísimo caso de corrupción”.
El 26 de agosto de 2022, Rodríguez, Salazar y Santana fueron imputados por el fiscal Ramón Antonio Torres Espinoza por la presunta comisión de: retardo u omisión dolosa de deberes, concierto para celebrar contratos y asociación delictuosa.
Este acto de imputación se realizó en el Juzgado 2° de Control de Apure, extensión San Fernando, a cargo de la jueza Rosmery Torres Leal, quien decretó la privación de libertad para los tres detenidos y ordenó su reclusión en el Destacamento 351 de la Guardia Nacional Bolivariana.
El 13 de octubre de 2022 la Fiscalía 55 presentó acusación contra Rodríguez, Salazar y Santana solicitando que se abra juicio en su contra.
Esta solicitud fue discutida el 15 de diciembre de 2022, durante la audiencia preliminar celebrada en el Juzgado 2° de Control cuya titular, Rosmery Torres, aceptó la propuesta del Ministerio Público y, por lo tanto, ordenó el enjuiciamiento de los imputados.
La llamada
Contra esta decisión, los defensores de los imputados han interpuesto recurso de apelación, el cual están a la espera de que resuelva la Corte de Apelaciones de Apure. Los abogados esperan que la Corte cancele la audiencia preliminar porque se realizó supuestamente negando a Laura Rodríguez el derecho a la defensa.
Los abogados defensores también argumentan que el Ministerio Público no ha explicado la actuación individual de cada uno de los tres imputados en los hechos de corrupción denunciados por el gobernador Eduardo Piñate.
“Esto lleva como consecuencia jurídica la inexistencia de la imputación formal”, dice el escrito de apelación.
El Ministerio Público informa que la investigación se inició por una supuesta llamada de un proveedor reclamando pagos pendientes y advirtiendo sobre el cobro de comisiones.
En ese sentido, los abogados defensores responden que el Ministerio Público no ha acreditado a las presuntas víctimas de estos cargos. “Por lo tanto, este crimen no se concretó”, dijeron.
vencido
Un mes antes de la detención de Laura Rodríguez (administradora), fue sometida y golpeada en las instalaciones gubernamentales de Apure, según testigos. Ese día, el personal de seguridad tuvo que sacarla por una puerta trasera para evitar ser atacada por vehículos motorizados estacionados alrededor de Palacio de Gobierno. Rodríguez estuvo internado varios días para tratar las lesiones que le provocó.
Luego de la golpiza, los presuntos oficiales destrozaron la casa donde vivía Laura Rodríguez, ubicada en San Fernando de Apure. Derribaron puertas y robaron todas sus pertenencias personales, según los vecinos.
En el expediente reposa un peritaje contable donde se concluye que “al analizar la documentación contable se indica que no se puede determinar el daño económico patrimonial a la Gobernación de Apure”.