El título de Tiburones de La Guaira fue histórico y también lo fue su paso por la Serie del Caribe, Miami 2024. Ángel Padrón, vestido de héroe inesperado, no disparó a la selección nicaragüense para que los venezolanos ganaran 10-0 y cerraran la ronda. Robin en primer lugar.
Ángel Padrón necesitó 88 lanzamientos para completar la hazaña que no se veía desde 1952. Una base por bolas en el octavo lo privó de la perfección, pero no le impidió escribir su nombre en la historia del béisbol caribeño.
El tambor y la samba resonaron en LoanDepot Park por la joya de la montaña y porque finalmente despertó la ofensiva que terminó despachando a 18 inatraibles.
Todo comenzó en el cuarto cuando, con las bases llenas y dos outs, Ramón Hernández abrió el marcador con una línea al jardín central que impulsó a Leonardo Reginatto y Alcides Escobar. Dos entradas después, Yasiel Puig anotó la tercera carrera con un roletazo.
En el séptimo, un doble de Wilfredo Tovar amplió la ventaja de los Sharks a 4-0. Pero la ofensiva realmente explotó en la octava entrada. Dobles consecutivos de Reginatto y Escobar, y sencillos de Francisco Arcia y Odúbal Herrera anotaron cinco carreras.
Ángel Padrón se une a Thomas Fine como los únicos lanzadores en la historia de la Serie del Caribe con un juego sin hits. Fino, con el uniforme de Rojos Habana, realizó el 21 de febrero de aquella Serie ’52 contra un equipo de Cervecería Caracas, dirigido por Alfonso “Chico” Carrasquel.
Así, con plena inspiración, con ganas de seguir haciendo historia, Tiburones se enfrentará en semifinales a los Curacao Suns, que hicieron historia al eliminar a los Criollos de Puerto Rico.