El manager de los Mets, Carlos Mendoza, y el relevista Yohan Ramírez fueron suspendidos por los sucesos del primer juego contra Rhys Hoskins de Milwaukee.
Mendoza cumplirá este domingo su suspensión de un partido, mientras que Ramírez apelará los tres partidos que recibió como castigo.
Hoskins ha sido el enemigo público número uno en Nueva York durante los primeros días de la temporada después de que su feo deslizamiento sobre Jeff McNeil para interrumpir una doble matanza provocó que las bancas se vaciaran en el Día Inaugural.
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Ramírez y Mendoza insistieron a los periodistas después de la derrota por 7-6 en que el tiro salió desviado y no fue intencional.
No fue intencionado: “A veces, cuando intento meterla también, la pelota simplemente corre. En ese momento, no tengo el agarre que estoy acostumbrado a tener. En ese momento, la cancha estaba simplemente corriendo, pero no intenté pegarle”, señaló Ramírez en ese momento.