Lo primero que hizo el presidente Nicolás Maduro al llegar el 28 de julio fue visitar la tumba de Hugo Chávez en el Cuartel La Montaña.
Pasada la 1 de la madrugada, el presidente y su esposa Cilia Flores publicaron un video donde los muestra depositando una corona de flores amarillas, azules y rojas en el mausoleo.
Desde un edificio cercano, algunos vecinos saludaron a la pareja presidencial con luces de sus teléfonos celulares. “La voz del pueblo se escucha”, dijo Maduro, agitando las manos.
Cuatro horas después, la pareja presidencial volvió a aparecer en las redes. “En las manos de Dios; a la victoria”, se escuchó decir al presidente según un video difundido a las 5:20 am. En la imagen se puede ver al Jefe de Estado sentado en la sala de su casa revisando su celular.
“Mira Cilita, la cantidad de videos que hay en las redes”, comentó Maduro mientras de fondo se escucha a Gloria al Bravo Pueblo en la voz de Hugo Chávez mientras Flores llega con dos tazas de café para sumarse al escrutinio de la red.
“Café recién hecho”, grita la llamada luchadora del primer tiempo, vestida como su marido: pantalón negro y chaqueta tricolor con las ocho estrellas estampadas en cruz como si de una banda se tratase. Él le da la taza de café y le arregla el cabello, que está recogido en una diadema. Coge el suyo y ambos se sumergen en la pantalla del teléfono que regaló al Jefe de Estado, el Presidente de China, Xi Jinping.
“Mira esto: la Diana Carabobo por todos lados”, le comenta Maduro a su esposa, mostrando la pantalla de su teléfono desde donde se puede escuchar la marcha militar compuesta por Lloviznando Cantos, el dúo que, junto a otros artistas, acompañó al presidente en la campaña electoral.
“Esto es en Maracaibo”, dice el presidente disfrutando del vídeo donde también se escucha la voz de Chávez con uno de sus gritos de guerra: “los que quieran una patria, vengan conmigo”.
Mientras ven ese video grabado en Maracaibo, Maduro se pone la taza de café en la rodilla izquierda.
Una vez finalizada la revisión de las redes, la pareja presidencial saldrá a la Escuela Ecológica “Simón Rodríguez”, ubicada en Fuerte Tiuna y donde votarán entre las 6 y 6:30 horas.
Al llegar al centro de votación, Maduro fue recibido por Kati Milano Tovar, directora de la Escuela, y luego fue abordado por un niño con problemas del habla que abrazó al presidente y se tomaron fotografías. Luego de hacer el control de rutina en el hierro electoral, Maduro salió con el recibo de voto que depositó en la caja a la que dejó pegada su mano derecha por unos segundos. Y con esa misma mano tocó su corazón como quien hace una oración.
A la salida respondió a las preguntas de periodistas nacionales y extranjeros. “Se reconocerá lo que diga el árbitro electoral”, respondió cuando se le preguntó si reconocería los resultados si fueran adversos. “En ningún país del mundo los resultados electorales se dan mediante encuestas a pie de urna”, añadió como complemento a la respuesta inicial.
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