«El que mucho lee y camina, mucho ve y sabe»… Miguel de Cervantes y Saavedra
Como cada miércoles, hoy es el día del correo.
Audibia M. Kaiser N. de St. Clamens, de Carolina del Norte, pregunta: «¿Crees que una mujer que demuestre que no acepta jugadoras ganará una demanda contra la Major League Baseball (MLB)?»
Amiga Yiya: Eso creo. Y ganará varios millones de dólares si logra demostrar que no fue aceptado, incluso si tiene las condiciones necesarias para jugar a la pelota en las Grandes Ligas. Creo que podría ganar el caso contra la MLB y cualquier equipo que le cierre las puertas. Además, los abogados para tal proceso estarán disponibles por docenas.
Rolando Díaz de Obregón pregunta: «¿Es cierto que en el año 2000 Vinicio Castilla era el granliga mejor pagado?»
Amigo Rollie: No señor, aunque estuvo entre los que recibieron los mejores honorarios. Vinicius, de los Rays, ganó seis millones. El que recibió el salario más alto fue Kevin Brown, de los Dodgers, 15 millones. El latinoamericano mejor pagado fue Pedro Martínez, Red Sox, 11 millones.
Claudio Martín P. desde Caracas, pregunta: «¿Por qué no hay rivalidades en el fútbol europeo caribeño como las de Caracas-Magallanes y Habana-Almendares?»
Amigo Yayo: Ayer respondí otra pregunta sobre fútbol. Como si estuviera a la moda. Pues bien, en Venezuela, el triunfo de la Selección de Béisbol en la Serie Mundial Amateur de 1941, en Cuba, fue definitivo para inyectar pasión a todos los venezolanos.
La mejor época del fútbol en Venezuela fue cuando los campeonatos eran organizados y patrocinados por las colonias formadas por inmigrantes europeos. Pero cometieron el error de no involucrar a los venezolanos. Y cuando esos iniciadores murieron o se retiraron, sus descendientes ya estaban completamente infectados por el béisbol.
A la larga, la Vinotinto emerge con mucho éxito, porque el fútbol es un gran espectáculo y la FIFA es la mejor organización deportiva del planeta. Es cierto que no existe una rivalidad intensa entre las selecciones venezolanas, pero sí una Vinotinto poderosa.
En cuanto a Cuba, nunca ha habido un gran entusiasmo por el fútbol. Los europeos que se asentaron en la Isla pronto se casaron con Habana o Almendares.
Edwin Alcalá C. de Santiago de Chile, pregunta: «¿Dónde está Roberto Petaguine y qué está haciendo?»
Amigo Ed: Luego de su valiosa experiencia en Grandes Ligas, Japón, Corea, México y Venezuela, se fue a vivir a Seattle y a sus 52 años se desempeña allí como entrenador de Secundaria.
Gracias a la vida por darme tanto, incluso a un lector como tú.
