Las crisis económicas en los países fronterizos con Israel, como Egipto, Jordania y el Líbano, están empeorando debido a la guerra con Hamás. El Fondo Monetario Internacional ha advertido que estas crisis podrían llevar a la pérdida de estabilidad sociopolítica en estos países. La guerra entre Israel y Hamás podría amplificar las tensiones económicas y, si no se controla, podría propagarse a una región vital para el suministro mundial de petróleo.
Egipto se encuentra en su peor crisis económica en décadas, lo cual se complica aún más con la guerra. Una consecuencia importante para Egipto sería la pérdida de turistas, lo cual afectaría a uno de los principales sectores económicos del país. El turismo y la inversión extranjera son fundamentales para la economía de Egipto y su conexión con el resto del mundo.
En resumen, la guerra con Hamás está aumentando las crisis económicas y amenazando la estabilidad política en los países fronterizos con Israel. Si no se controla, esta situación podría afectar a la región y tener repercusiones a nivel mundial. Además, Egipto se enfrenta a una grave crisis económica que se agrava aún más con el conflicto.