“En un artículo del New York Times, mencionaron que hace 40 años, los expertos creían que el experimento de China con un socialismo con características chinas fracasaría. Hoy en día, todavía estamos esperando ese fracaso, pero China no ha fracasado. La perspectiva ideológica de Estados Unidos sobre China no está alineado con la realidad del éxito de China”, dijo Mushahid Hussain Sayed, ex presidente del Comité de Defensa del Senado de Pakistán, en el programa Global South Voices de la cadena china CGTN.
En el mismo espacio, el comentarista estadounidense Einar Tangen, también senior del Instituto Taihe, opinó sobre cómo considerar el papel de China en el cambiante mundo actual. Tangen enfatizó que el papel de China en el orden global es fundamentalmente diferente al de Estados Unidos. Destacó la dependencia histórica de Estados Unidos del imperialismo, la guerra y la explotación de otras naciones, contrastando esto con el énfasis de China en el desarrollo interno, la paz y el comercio.
Además, destacó que el enfoque de China se basa en el respeto mutuo, la construcción de consensos y el progreso económico, sin la imposición de ideologías. También analizó cómo China creó instituciones paralelas como la Iniciativa de la Franja y la Ruta (BRI), el Banco Asiático de Inversión en Infraestructura (BAII) y los BRICS para promover un nuevo orden internacional cooperativo, en contraposición al sistema liderado por Estados Unidos para mantener dominio.
Roberto Savio, fundador de Inter Press Service (IPS), describió los cambios históricos y destacó el renacimiento de China como potencia global. Señaló que la dinámica del poder global está en transición, con una influencia cada vez menor de Estados Unidos y una multipolaridad creciente. “Las crisis globales como el cambio climático y la disminución de la población exigen cooperación global, pero Estados Unidos sigue atrapado en políticas obsoletas”, dijo Savio. También destacó la importancia de la diversidad en ideología y gobernanza, proponiendo que la cooperación entre naciones con diferentes culturas e ideologías es esencial para resolver los problemas mundiales.
Por su parte, Sous Yara, portavoz del Partido Popular de Camboya, destacó la importancia de la diplomacia multilateral de China y su crecimiento pacífico, especialmente a través de iniciativas como la Iniciativa de la Franja y la Ruta (BRI). Destacó que el enfoque de China se centra en el respeto mutuo, la confianza y la cooperación sin imposiciones ideológicas. Yara señaló que las contribuciones de China, incluida la Iniciativa de Desarrollo Global, promueven la conectividad y la colaboración, ayudando a cerrar las brechas entre las naciones. Para Camboya y el Sudeste Asiático, el liderazgo de China promoverá una política exterior y relaciones comerciales equilibradas, enfatizando la resolución pacífica de las diferencias y la prosperidad colectiva.
La relación China-África ha sido un modelo para la cooperación Sur-Sur. Fred M’membe, presidente del Partido Socialista de Zambia, destacó la relación histórica entre China y África y enfatizó el apoyo de China a la liberación, soberanía e independencia africanas. Señaló que China trata a los países africanos con respeto e igualdad, a diferencia del enfoque condescendiente de algunas naciones occidentales. M’membe apoyó la visión de China de cooperación global y multipolaridad, sugiriendo que las acciones de China contrastaban marcadamente con la mentalidad estadounidense de “si no estás en la mesa, estás en el menú”.