Durante la V Jornada Hidráulica de la UCAB, expertos de la Academia Nacional de Ingeniería y Hábitat descartan un colapso del sistema eléctrico venezolano, pero advierten que para superar la crisis es necesario rehabilitar las termoeléctricas y ampliar la oferta de megavatios . disponible
Inversiones por 15.540 millones de dólares en los próximos 15 años son las que se necesitan para adaptar el sistema eléctrico nacional a la demanda actual y futura. Los académicos descartan un colapso de la infraestructura, pero se deben reformar las leyes del sector para permitir la participación de empresas privadas en su mantenimiento y recuperación.
El Departamento de Hidráulica de la Escuela de Ingeniería Civil de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB), dirigido por el profesor Juan Carlos Martínez, organizó varias conferencias en las que se reunieron estudiantes, profesores y profesionales del área, quienes compartieron información sobre tendencias, proyectos y profesionales. Estudios relacionados con el agua y su impacto en el campo de la ingeniería.
Durante la V Jornada de Hidráulica de la UCAB, el ingeniero civil Eduardo Páez-Pumar -miembro correspondiente de la Academia Nacional de Ingeniería y Hábitat-, ofreció un detallado recorrido histórico por las principales centrales hidroeléctricas y termoeléctricas del país (principalmente las de la Región Andina, el altiplano occidental y los de la cuenca del Orinoco).
En su conferencia “Presente y futuro de la generación hidroeléctrica en Venezuela”, identificó cuáles son las necesidades energéticas actuales en todo el país, los nuevos proyectos que deben ejecutarse de aquí a 2040 y enfatizó la recuperación de plantas y la construcción de nuevas líneas de transmisión para difundir la electricidad por todo el territorio nacional.
“Venezuela cuenta con la infraestructura necesaria para atender toda la demanda de energía eléctrica”, afirmó el ingeniero, quien es fundador de la Asociación Integral de Políticas Públicas y asesor de la Cámara Venezolana de la Construcción (CVC).
Señaló, sin embargo, que es necesario atender el déficit de suministro debido al deterioro que existe en las centrales hidroeléctricas y termoeléctricas. Para esto, Recomendamos que el Estado permita que empresas privadas participen en la rehabilitación. y mantenimiento de las tareas más importantes.
En las condiciones actuales, el negocio “no es tarea fácil” – advirtió el ingeniero – ya que las empresas de servicios eléctricos son legalmente dependencias del Estado. y las regulaciones actuales no permiten la intervención del sector privado en el sector.
“La Cámara Venezolana de la Construcción planteó a Corpoelec la posibilidad de que empresas privadas participen en la rehabilitación de algunas termoeléctricas del país”, comentó, al tiempo que recordó que Fedecámaras recibió recientemente a la vicepresidenta de la República, Delcy Rodríguez, un estudio que fue realizado por la CVC para evaluar diferentes propuestas en materia eléctrica.
*Lea también: Fedecámaras presenta al Gobierno propuesta para fortalecer el sistema eléctrico nacional
Déficit en producción termoeléctrica
Eduardo Páez-Pumar descartó la posibilidad de un colapso total del sistema eléctrico e indicó que la falla del servicio se debe -en gran medida- a deficiencias en la disponibilidad de las termoeléctricas existentes en el país.
Precisó que, al 2013, año con los últimos datos oficiales disponibles, el sistema eléctrico nacional incluía 4.724 unidades de generación, entre centrales térmicas, hidráulicas, parques eólicos, sistemas fotovoltaicos y sistemas híbridos, infraestructura capaz de producir, en teoría, 30 292. megavatios de electricidad.
El experto señaló que en 2023, es decir una década después, la capacidad instalada nacional alcanzará los 34.314 megavatios, el 40% proveniente de hidroeléctricas y el 51% de termoeléctricas. Sin embargo, durante ese año Las fuentes hidroeléctricas proporcionaron el 77% de la electricidad del país y sólo el 23% fue generado por plantas termoeléctricas.
“En 2023 había una demanda de 14.150 Mw, pero una disponibilidad de 13.130 Mw. Al tener una baja disponibilidad y muy pocas plantas operativas, no hay generación suficiente para cubrir las necesidades de la demanda”, explicó Páez-Pumar.
“Esto es parte del problema que tenemos, porque dependemos -básicamente- de la energía que viene del bajo Caroní (donde hay mucha generación hidroeléctrica), pero hay restricciones en el sistema de transmisión al resto del país. ; y la generación térmica que completa el sistema interconectado nacional está en baja disponibilidad y eso empeora la situación”, agregó.
El especialista se refirió a las consecuencias del cambio climático -que ha producido severas sequías en Venezuela y en todo el mundo- y recordó lo ocurrido con la represa hidroeléctrica de Guri, en el estado Bolívar, en 2003, 2010 y 2016, cuando el embalse se alcanzado niveles mínimos que comprometen su capacidad de generación.
“Lo que se hace habitualmente en los países con un sistema hidroeléctrico equilibrado con un sistema termoeléctrico es utilizar más este último para conservar el agua y evitar que las represas se sequen”, afirmó.
Plan de recuperación hasta 2025
Para concluir, Eduardo Páez-Pumar presentó un conjunto de proyectos de construcción, rehabilitación o terminación que, en un período de 15 años (2025-2040), podrían incrementar la generación de electricidad en 11.942 megavatios, con una inversión total de 15.540 millones de dólares.
La lista incluye, entre otras iniciativas, completar los ciclos combinados de centrales termoeléctricas como Termo Zulia, Bachaquero e India Urquía; incorporar pequeñas centrales hidroeléctricas en embalses existentes; construir una planta solar en Guárico y una eólica en Falcón, así como concluir las obras civiles y electromecánicas de la Central Hidroeléctrica Tocoma, Río Capaz, Las Palmas-Majaguas, El Infierno (Río Orinoco), Tayucay-elevación 360 metros sobre el nivel del mar. nivel del mar y otros.
“Esto completa la idea de lo que puede ser el sistema eléctrico nacional en el futuro. Pero está claro que el aumento de la capacidad de generación se dará en un largo tiempo”, destacó.
*Lea también: City Monitor estima que último gran apagón duró un promedio de 14 horas
: 442