En un hecho histórico, el lanzador venezolano Ángel Padrón se unió a Thomas Fine al convertirse en el único lanzador sin hits ni carreras en la Serie del Caribe. Este logro lo consiguió el 7 de febrero de 2024, representando a su equipo contra Nicaragua. Esta gesta tuvo lugar en Miami, donde Padrón realizó 88 lanzamientos, ponchó a cuatro oponentes y solo permitió una base por bolas que lo alejó de la perfección. A pesar de no alcanzar la perfección, Padrón mantiene la calma y se enfoca en hacer lo que mejor sabe hacer.
En una conferencia de prensa, Padrón reflexionó sobre el juego, expresando que el tiempo de Dios es perfecto y que se queda con lo que pasó. Destacó también la importancia de una buena defensa, como la intervención de Ramón Flores en el jardín central que salvó el juego en el séptimo tramo. Además, compartió que la preparación para su apertura fue un desafío, ya que no se esperaba ser titular hasta pocas horas antes del partido.
Piensa, pero no demasiado.
Padrón también mencionó la importancia de no dejar que las emociones dominen su desempeño durante el juego. Destacó que tomó lanzamiento por lanzamiento, bateo por bateador y entrada por entrada sin pensar demasiado en el no-hitter. En el momento del último out, Padrón expresó sus sentimientos diciendo: “Quería llorar, realmente no tengo palabras, no tengo palabras”.
Sin defensa no hay historia
El lanzador reconoció la importancia de la defensa en este logro histórico, resaltando la jugada fantástica de Ramón Flores en el jardín central. A pesar de los desafíos en la preparación para su apertura, Padrón logró un desempeño memorable que lo posiciona en la historia del béisbol.