Un nuevo ataque del ejército de ocupación israelí contra un campamento en la “zona humanitaria” de Khan Younis, al sur de la Franja de Gaza, mató a 40 personas y dejó al menos 60 heridos.
Un portavoz de la unidad de defensa civil de Hamas fue citado por la agencia de noticias Shehab diciendo que “familias enteras fueron tragadas bajo montañas de arena en el ataque”, que dejó enormes agujeros en el suelo.
Explicó que el ejército de ocupación era plenamente consciente de que en esta zona sólo había desplazados, niños y mujeres, pero los atacó directamente y “los mató por matar”.
Esta no es la primera vez que Israel ataca la zona humanitaria a lo largo de la costa en el sur de Gaza. El pasado mes de julio llevó a cabo uno de sus bombardeos más violentos contra esta zona, matando a 90 personas en las playas de Mawasi.
El 90% de la población de Gaza -más de dos millones de personas- ha sido desplazada por la guerra, y la gran mayoría se hacina en un enjambre de tiendas de campaña en la zona humanitaria, con malas condiciones humanitarias marcadas por la escasez de agua o electricidad.
Según la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), “más de un millón de personas no recibieron raciones de alimentos en agosto en el sur y centro de Gaza” debido al reducido flujo de camiones de ayuda humanitaria que entran en el enclave.