José Altuve continuó su gran racha ofensiva el sábado, duplicando cuatro turnos al bate con una impulsada (su número 40) durante la victoria de los Astros por 13-12 sobre los Mellizos de Minnesota en Target Field.
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Sin embargo, la celebración se vio empañada luego de que el venezolano abandonara el juego en la octava entrada tras ser golpeado en la mano izquierda por un lanzamiento de 94.3 millas por hora de Josh Winder.
Afortunadamente para los Astros, solo pareció ser un susto, pues las radiografías resultaron negativas y solo revelaron un hematoma en esa zona.
“Lo primero que uno piensa, sobre todo cuando ha sido (lastimado por las pelotas), es que algo no está bien”, dijo José Altuve, quien admitió que se preocupó cuando lo golpearon, pero se sintió aliviado cuando los exámenes que le hicieron. a cabo fracturas. Aunque también dijo que todavía siente un poco de malestar.
“Gracias a Dios por ahora está todo bien y ojalá mañana pueda regresar”, dijo “Astroboy”, quien dejó su promedio en .310, con un OPS de .826.