El paso de José Néstor Pékerman por el banquillo de la selección Vinotinto ha terminado en un fiasco deportivo y una calamidad para las finanzas de la Federación Venezolana de Fútbol.
Tras cortar abruptamente el ciclo de Pékerman el 24 de marzo de 2023 debido a diferencias con su representante y directivo de las selecciones, Pascual Lezcano, la FVF acordó pagarle al técnico argentino la cantidad de 3.420.000 dólares en concepto de “compensación” del contrato.
La FVF se comprometió a pagar la deuda en cuatro cuotas de $855.000 cada una, pero no respetó las fechas acordadas, lo que resultó en una multa del 35% de la indemnización por “incumplimiento total o parcial de cualquiera de los pagos”.
Pékerman demandó a la FVF ante la Cámara de la FIFA y esta decidió fallar parcialmente a favor del técnico en noviembre de 2023.
La FVF argumentó que el retraso en el pago de las indemnizaciones se debió a “restricciones bancarias en Venezuela” derivadas de sanciones económicas impuestas por gobiernos extranjeros.
La FIFA decidió que la FVF deberá pagar a Pékerman la suma de $1.710.000 netos en concepto de indemnización más intereses y penalidades contractuales.
En total, Pékerman obtendrá $2.855.700 por la causa, sin contar que ya pagó dos cuotas con sus respectivos intereses predeterminados por $1.761.300.
La FVF tenía 21 días para apelar ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo de Suiza o 45 para cancelar la deuda, so pena de recibir nuevas sanciones, como la retención del 20% de los derechos sobre los fondos de la FIFA.