El presidente de Bolivia, Luis Arce, dijo este domingo “no se equivoque” al expresidente Evo Morales sobre el golpe militar que el líder del oficialismo calificó como un “autogolpe de Estado” en las últimas horas.
“¡Evo Morales, no te equivoques una vez más! “Claramente lo que pasó el 26 de junio fue un golpe militar fallido en Bolivia”, escribió el presidente boliviano en sus redes sociales.
“¡No se pongan del lado del fascismo que niega lo sucedido! Los responsables que intentaron tomar el poder por la fuerza de las armas son perseguidos y serán juzgados, como fue el caso de los poderes de 2019”, añadió el presidente.
La publicación de Arce surge en respuesta a las declaraciones del expresidente Morales que realizó la mañana de este domingo, cuando declaró “Lucho Arce engañó al pueblo boliviano y al mundo entero con este golpe o autogolpe”, durante su programa dominical en Radio. Kawsachún.
El jefe del Movimiento al Socialismo (MAS) dijo que tiene dudas sobre la acción militar que el Gobierno calificó de “intento de golpe de Estado”, y que el llamado que le hizo el presidente Arce el miércoles durante el levantamiento militar “fue una solidaridad de mentiras”.
Intereses extranjeros
Cabe destacar que el presidente de Bolivia, Luis Arce, aseguró en esta entrevista con EL PAÍS, que detrás del golpe militar del pasado 26 de junio hay “intereses extranjeros” que quieren mantener los recursos naturales del país.
Por su parte, el Ministro de Gobierno (Interior) de Bolivia, Eduardo del Castillo, aseguró este domingo que el exjefe del Ejército Juan José Zúñiga ordenó fusilar a la población durante el fallido golpe de Estado del pasado miércoles, según Prensa Latina. .
“El señor Zúñiga también había dado instrucciones de disparar contra las personas que se encontraban en los alrededores del Palacio Quemado y la Casa Grande del Pueblo”, dijo Del Castillo en una entrevista con el canal estatal Bolivia TV.
Informó que el comandante de la Octava División, según algunos hallazgos, le dijo que no iba a respetar esa orden y Zúñiga amenazó con liberarlo del cargo.
Sin embargo, según Del Castillo, ese funcionario lo regañó “¿qué más falta?”. qué más podemos hacer? ¿Disparar a la gente? Todo lo que hemos hecho ya está mal”.
Durante la ocupación de la Plaza Murillo por cientos de tropas reforzadas con tanques, 14 personas resultaron heridas por balas disparadas por soldados y muchas resultaron heridas.